METRO

El dia tan temido llego, pero no fue tan terrible, mas me dio risa que otra cosa, y fue hoy sabado 11 de Agosto de 2007.

Oficialmente los hechos sucedieron de la siguiente manera: me vine al estudio para ver algunos detalles, en el camino me fije en lo bella que es la cordillera, y en algo que lei sobre tener este macizo andino tan cerca, y no verlo nunca, lo lei hace tiempo, y en realidad seria el tema central de mi relato, pero no lo es. Prefiero el Metro a las micros, y llevo siempre mi reproductor mp3, que tambien es mi camara y mi celular, un sonyericcson k750i, me encanta. En fin, llegue a la estacion, escuchando a Bono cantando acerca de la ciudad de las luces segadoras... pero de pronto me percate de que por los monitores instalados en el anden, sonaba uno de los temas que mas me ha marcado en la vida, que escuche en ese tiempo, en que uno nunca sabe que esta viviendo, hasta cuando ya se ve a la distancia. Me di cuenta de que me deje influir, de que me deje llevar, de que me hice parte de la tribu, fui condenadamente joven, creo que parte de eso se mantiene hasta hoy; varios kilos despues, por cierto, pero senti ese sabor del tiempo masticado por los avatares del destino, senti esa brisa en la espalda que nos alerta de que algo de verdad nos lastima, o nos importa, senti ese cosquilleo en las manos, me retire los fonos de mis oidos, deje que esas notas llegaran una vez mas a emocionarme, pero esta vez, no fue en una fiesta en el barrio Santiago Centro, no fue en la casa de algun amigo, compartiendo videos y cds, no fue viendo mi coleccion de dvds, no fue en el Alameda, ni en la Planet, fue en el Metro de Santiago, fue la musica ambiental. Nisiquiera fue un lcd, no, fue un televisor Samsung, colgado del techo, el que mostraba a Martin Gore, Alan Wilder, Andrew Fletcher y por supuesto a David Gahan, cantando Policy of Truth. Y por primera vez, me senti adulto, me vi moviendo la patita en el anden del metro Tobalaba, emocionado por un disco que se grabo el 89-90, que se edito mucho hantes de que nacieran mis hijos, que es mayor que mi hermano menor, que me llevo a ver a Depeche Mode el año 1994 en el Velodromo del Estadio Nacional. Vestido de riguroso negro, con bototos incluidos. Me senti adulto al escuchar "mi" disco siendo usado de musica ambiental; que ya no sorprende ni molesta a nadie, despues me rei... me volvi a colocar los fonos, busque el maldito tema en mi celular, subi demasiado el volumen y lo disfrute como la primera vez.